Pedir la nacionalidad española, un trámite que ahora es gratuito, costará 75 euros. El Ministerio de Justicia va a crear una nueva tasa que pagarán todos los extranjeros que soliciten la nacionalidad española (lo hacen unos 140.000 cada año). La tasa será sólo por presentar la solicitud, al margen de que después se conceda o no; a esa cantidad el extranjero tendrá que sumar, además, la matrícula en el Instituto Cervantes (distinta en cada país), que será quien realice las pruebas de idioma e integración. Justicia alega que así funciona en la mayoría de países europeos, con tasas mucho más altas, y asegura que el dinero recaudado —unos 52 millones de euros en cinco años— se invertirá en modernizar el sistema tecnológico para agilizar los plazos de concesión de nacionalidades.
La nueva tasa fue anunciada ayer —refiriéndose solo a las solicitudes de judíos sefardíes— por la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, después de que el Consejo de Ministros aprobara el proyecto de ley que facilita la concesión directa de la nacionalidad a los descendientes de judíos expulsados de España en el siglo XV. El anteproyecto de esa ley había sido ya aprobado el pasado febrero, pero ha sido modificado en algunos aspectos antes de que el Gobierno le diera hoy el definitivo visto bueno y lo remitiera a las Cortes. Entre esos cambios está la obligación que tendrán los sefardíes de pagar una tasa de 75 euros para solicitar la nacionalidad española.
La ley sobre los sefardíes, sin embargo, incluye ahora una disposición final segunda que modifica el Código Civil y que extiende el cobro de esa nueva tasa a todos los extranjeros solicitantes de nacionalidad, tanto si la piden por carta de naturaleza (es decir, acreditando un vínculo especial con España) como si lo hacen por razón de residencia. “Renovar el pasaporte cada diez años cuesta 25 euros. Creemos que es razonable que la solicitud de nacionalidad, que es para toda la vida, que no es un servicio esencial y que supone unos gastos considerables para la Administración, tenga también un coste”, argumenta el subsecretario de Estado de Justicia, Juan Bravo. La tasa se cobrará sólo por pedir la nacionalidad, aunque luego Justicia la deniegue.
El proyecto de ley inicia ahora la tramitación parlamentaria en el Congreso y el Senado. Saldrá de las Cortes previsiblemente a finales de año, y seis meses después entrará en vigor. La tasa, por tanto, empezará a cobrarse a quienes soliciten la nacionalidad a partir de mediados de 2015, aproximadamente.
Cada año entran en el registro del ministerio unas 140.000 solicitudes de nacionalidad; el 85% se concede, pero con unos tiempos de tramitación de dos, tres o hasta cuatro años, según Bravo. La gestión de todos esos expedientes estaba asignada a un departamento de apenas 40 personas hasta que, en 2012, Justicia encargó a los mil registradores de la propiedad que hay en España que se hicieran cargo temporalmente —y aún gratis— del trabajo. El objetivo era desatascar cientos de miles de solicitudes que se amontonaban sin resolver. Ya entonces el ministerio prometió desarrollar una “infraestructura tecnológica” para ese “plan intensivo”, que termina este año.
Ahora Justicia asegura que invertirá 30 millones en cinco años —de los 52 millones que recaudará con la tasa— a otro plan de inversión tecnológica para acortar los plazos de tramitación de las solicitudes; el resto del dinero, afirma Bravo, es para financiar el coste de la emisión de los certificados. El retraso en la concesión de la nacionalidad española impide a los extranjeros afectados obtener becas de estudios, reunir a sus familias en España o viajar y trabajar en otros países de Europa.
Hay países europeos, como Italia, en los que no se cobra nada por pedir la nacionalidad (el proceso burocrático, sin embargo, es tan complicado que acaba casi siempre en una demanda administrativa que cuesta 800 euros presentar). Otros muchos sí cobran tasa, y con cantidades bastante más altas: en Reino Unido es de 1.115 euros; en Alemania, de 255 euros (aunque hay deducciones para personas con rentas bajas). En Francia es de 55 euros, y en Bélgica, de 150 euros.
El Pais
Las nacionalizaciones se elevan un 65% (55.000 personas) en Madrid por el arraigo y la agilización de trámites
El padrón lleva varios años mostrando un descenso paulatino en el número de extranjeros residentes en Madrid. A simple vista, podría parecer que los inmigrantes están saliendo en masa hacia sus países de origen. Sin embargo, la realidad es diferente: no todos los extranjeros que desaparecen del padrón se están yendo de Madrid, sino que una gran parte de ellos se han nacionalizado como españoles. De hecho, en 2013 se concedió la nacionalidad a 55.072 extranjeros residentes en Madrid, un 64,9% más de los que lo consiguieron el año anterior (33.387 en 2012), según datos ofrecidos por la Consejería de Asuntos Sociales y extraídos de los censos del Ministerio de Justicia y el Colegio de Registradores.
El boom de nacionalizaciones durante 2013 se debe principalmente a la "agilización de los trámites" para conseguir la ciudadanía española, según el Ministerio de Justicia, que puso en marcha un plan de choque para desatascar el volumen de peticiones pendientes en los registros civiles. El colapso había alcanzado tal punto que los ciudadanos llegaban a soportar esperas de más de tres años desde que entregaban la documentación hasta que eran citados para jurar la Constitución y convertirse en españoles.
Para solucionar el atasco, el Ministerio de Justicia encargó al Colegio de Registradores el Plan Intensivo de Nacionalidad (PIN). Mediante esta encomienda, los registradores han clasificado los archivos pendientes y los han valorado, cubriendo así el trabajo que tenía desbordados a los funcionarios de los registros civiles. Durante el tiempo que ha durado el PIN (de septiembre de 2012 a principios de 2014), se han concedido en Madrid 78.629 nacionalizaciones, según datos del Ministerio de Justicia. De todos ellos, los correspondientes a 2013 son 55.072.
Se deniega más a originarios de Bangladesh
Los extranjeros que más optan por nacionalizarse son los procedentes de países latinoamericanos. Según los registros de Justicia, los países de origen mayoritarios de los nacionalizados en Madrid son Ecuador (16.857 concesiones durante todo el transcurso del plan especial), Perú (12.656) y Colombia (11.319). En cuarto lugar se sitúan los originarios de Marruecos (7.568 personas). Sin embargo, también se han producido más de 10.000 denegaciones en Madrid, sobre todo a ciudadanos procedentes de Bangladesh (un 32% de los originarios de este país son rechazados), Nigeria y Rumanía (en los dos casos se le deniega al 26%), según datos del Colegio de Registradores.
Además de la agilización de los trámites, los expertos también achacan el aumento de nacionalizaciones a la mayor integración de los inmigrantes. "Se están quedando las personas que llevan aquí cerca de diez años porque ya están arraigados, han tenido aquí a sus hijos y han creado lazos de amistad e incluso familiares, con parejas mixtas. Ocurre más con los latinoamericanos, debido a que han tenido más facilidades para integrarse, por el idioma y las costumbres compartidas", explica Yolanda Villavicencio, presidenta de Aesco, una asociación que trabaja por la integración de los extranjeros en Madrid.
"Se suele pensar que se van a sus países de origen, pero en realidad una gran parte de ellos se quedan porque allí tienen menos oportunidades que aquí, incluso en esta época de crisis", añade Villavicencio. Una vez que deciden establecerse indefinidamente en Madrid, el paso lógico es solicitar la ciudadanía española. "Al estar nacionalizados disfrutan de derechos ciudadanos completos, no tienen la obligación de cotizar para poder permanecer en el país, tienen más facilidades para trabajar con cuenta propia, hay menos trámites burocráticos cada vez que necesitan presentar papeles y tienen más libertad de movimiento porque es más fácil conseguir visados siendo europeo", explica la experta en inmigración.
Ventajas de tener la nacionalidad:
- Derecho a votar y ser elegido: El nacionalizado español tiene derecho al sufragio activo (votar en todas las elecciones) y al sufragio pasivo (ser elegido como representante en las elecciones).
- Ser funcionarios: Los nacionalizados tienen derecho "a acceder en condiciones de igualdad a las funciones y cargos públicos".
- Estancia libre en España: No necesitan trabajar y cotizar para poder permanecer en España, lo que les da mayor estabilidad en caso de quedar en paro, por ejemplo.
- Menos trámites: Se agiliza la burocracia, ya que no necesitan pedir documentos oficiales a sus países de origen. También les facilita la obtención de préstamos, la creación de empresas o la petición de ayudas públicas.
- Mayor facilidad para viajar: Moverse por el extranjero es más fácil siendo español, ya que la UE y España tienen convenios con más países para conceder visados.
- Protección diplomática: Los nacionalizados tienen derecho a ser acogidos, protegidos y asesorados por las embajadas españolas en sus estancias en el extranjero.
20minutos
Más de 100 mil cubanos esperan ciudadanía española
En el consulado general de La Habana se han presentado más de 190 mil solicitudes de nacionalidad, y el volumen también ha sido muy grande en otras ciudades cubanas.
En la actualidad se encuentran en trámite un total de 102.344 expedientes de cubanos que solicitan la ciudadanía española acogiéndose a la llamada ¨ley de nietos”, informó el ministerio de Justicia de España.
Representantes del Gobierno español dijeron a la agencia Europa Press que en el caso de Cuba el tiempo medio para resolver una petición es de 18 meses, aunque depende de la complejidad del expediente y si se requiere aportar documentación adicional.
En el consulado general de La Habana se han presentado más de 190 mil solicitudes de nacionalidad, y el volumen también ha sido muy grande en otras ciudades cubanas.
En total, contando todos los países hispanoamericanos, se han recibido medio millón de peticiones de nacionalidad española, y 300 mil de ellas ya fueron concedidas.
Cientos de personas hacen cola en un parque habanero frente a la Embajada de España en Cuba.
Cubanet
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