Por Kourosh Ziabari
Irán es el país más desvirtuado e incomprendido
del mundo. No son palabras mías, sino las de decenas de turistas, periodistas y
académicos extranjeros que han viajado a Irán en los últimos años.
En un intento dañino y concertado los medios de
comunicación dominantes se han esforzado al máximo para retratar a Irán como un
país peligroso, anormal, extraño y horrible que busca desarrollar armas
nucleares para aniquilar a Israel. A los iraníes se les representa
descaradamente como fanáticos, terroristas y gente sin civilizar, y a Irán como
un desierto apartado donde no hay ni civilización ni vida urbana ni
modernidad.
La demonización y el aislamiento de Irán forman
parte de una campaña integral y polifacética cuyo propósito es vilipendiar y
condenar al ostracismo al mundo musulmán, y que se intensificó desde los
atentados del 11 de septiembre, de los que se culpó a los musulmanes y que
pusieron en marcha la guerra global contra el terrorismo.
Antes de viajar a Irán todo turista extranjero
teme que lo maten o al menos que lo detengan por espía. Percibe a Irán con los
estereotipos y tópicos de los medios de comunicación dominantes y muchos de
estos turistas no saben ni siquiera que los iraníes son los mismos persas que
vivieron en la antigua Persia durante más de 7.500 años.
Hay grandes mitos sobre Irán que muchas personas
en el mundo han llegado a creer y me gustaría intentar desmontarlos.
Los iraníes son terroristas
Si interpretamos y traducimos el “terrorismo”
como un acto que coacciona, aterroriza o mata a personas inocentes con el
propósito de sembrar el horror o mostrar fuerza e influencia, a Irán no se le
puede llamar terrorista, ni siquiera un Estado que ampara el terrorismo, como
alegan los fervientes enemigos de Irán. La última vez que Irán atacó e invadió
una nación soberana fue en 1738, cuando el rey de la dinastía afshárida, Nadir
Shah, invadió la India. Esto significa que desde hace 274 años Irán es un país
pacifista que ni ha dañado ni ha hostigado a otros países, lo que incluye a sus
vecinos y a pesar de que muchos de éstos le hayan provocado e intrigado de
manera beligerante.
Comparen este dato con las constantes guerras
sanguinarias de Estados Unidos. Desde su independencia en 1776 Estados Unidos ha
estado envuelto en más de 50 expediciones militares. En su original libro de
2011 The Deaths of Others [La muerte de los otros] el intelectual
estadounidense, defensor de lo público y director ejecutivo y científico
principal de investigación en el Centro de Estudios Internacionales del
Instituto Tecnológico de Massachusetts, John Tirman, detalla las bajas causadas
por las guerras estadounidenses de los últimos tres siglos. A diferencia de
muchos de nosotros que no nos atrevemos a cuestionar la despreocupación del
público estadounidense y de los medios de comunicación dominantes por las bajas
de civiles en las guerras que libra el Tío Sam, Tirman documenta con detalle “el
destino de civiles en las guerras libradas por Estados Unidos”. Tirman reconoce
en su libro que entre seis y siete millones de personas murieron sólo en las
guerras de Corea, Vietnam e Iraq, la mayoría de ellas civiles inocentes. No
necesitamos ser expertos en historia para calcular cuántos civiles desarmados,
lo que incluye a mujeres y niños, murieron en las expediciones militares de
Estados Unidos por todo el mundo. James A. Lucas realizó un estudio detallado,
publicado en Counter Currents en 2007, en el que documentó las bajas civiles en
las guerras de Estados Unidos.
“El pueblo estadounidense seguramente no conoce
estas cifras y menos todavía las guerras por encargo de las que Estados Unidos
es también responsable. En las guerras de Afganistán, Angola, República
Democrática del Congo, Timor Oriental, Guatemala, Indonesia, Pakistán y Sudán
hubo entre nueve y catorce millones de muertes”, escribe.
Imaginen por un momento que Irán fuera quien
hubiera matado a varios millones de ciudadanos inocentes en decenas de guerras y
ataques en otros países. ¿Qué habría ocurrido? ¿Quién se merece de verdad el
título de “Estado que ampara el terrorismo”? ¿Es un honor que te mate un soldado
estadounidense? ¿Es que Estados Unidos tiene derecho a aniquilar a voluntad a
miles de personas sin que se les exija responsabilidades por ello?
Los iraníes son incivilizados
Muchos de los que piensan que Irán es un país
incivilizado e inculto simplemente no conocen las realidades de las
impresionantes y antiguas civilización y cultura de Irán. Irán es el país más
viejo del mundo si tenemos en cuenta su fundación. Los primeros asentamientos
urbanos en la Persia antigua datan del año 4.000 antes de Cristo y se cree que
el primer imperio persa se estableció en 3.200 antes de Cristo. Los primeros
objetos arqueológicos de Irán se encontraron en los emplazamientos de Kashafrud
y Ganj Par del paleolítico inferior, es decir, hace aproximadamente 300.000
años.
El mayor museo del paleolítico de Oriente Próximo
se halla en la ciudad iraní de Kermanshah. Los embalses artificiales más
antiguos del mundo se encuentran en Irán. Irán es el primer productor y
exportador mundial de alfombras hechas a mano, que es un elemento inseparable de
la cultura persa. La mayor colección mundial de joyas imperiales pertenece a
Irán. La arquitectura iraní es uno de los sellos de la arquitectura islámica y
decenas de mezquitas, caravasares, iglesias, puentes y palacios magníficos que
se hallan por todas partes dan fe de que la arquitectura iraní es un legado
incomparable sin parangón en todo el mundo.
Los iraníes han realizado históricamente
contribuciones inestimables a la cultura, ciencia, economía y estilo de vida
mundiales. Quizá sea interesante saber que los primeros ladrillos utilizados los
hicieron los iraníes. El primer zigurat se construyó en Irán en el emplazamiento
histórico de Sialk. En torno a 5.000 antes de Cristo los iraníes fueron los
primeros en inventar el Tar (laúd) que luego llevó al desarrollo de la guitarra.
La primera declaración mundial de derechos humanos la elaboró en Irán Ciro II el
Grande entre 576 y 529 antes de Cristo: lo que se llama hoy el Cilindro de Ciro,
conservado en el Museo Británico. El primer yakhcal (frigorífico) del mundo se
diseñó en Irán en torno a 400 antes de Cristo. De acuerdo con los hallazgos
arqueológicos, los iraníes inventaron las primeras pilas que se utilizaron
presuntamente en el proceso de galvanoplastia. El científico iraní Rhazes fue el
primer erudito del mundo que introdujo el uso sistemático del alcohol en la
medicina en torno al 846 después de Cristo. El Canon de Medicina, considerado
uno de los manuales fundamentales en la historia de la medicina moderna, lo
escribió un científico iraní llamado Avicena hace casi mil años.
Pero olvidemos todos los logros e innovaciones
culturales y científicos de los iraníes a lo largo de la historia. Lo que
diferencia al pueblo iraní de otras naciones y le da su identidad única y sin
igual es su sentido de la cortesía, educación y modestia. No hay violencia y
agresividad en las películas iraníes como existen en las películas
estadounidenses. Las conversaciones diarias entre los iraníes están repletas de
proverbios, poesía y referencias literarias. Los cumplidos a las mujeres, los
mayores y los niños son parte del estilo de vida y la cultura iraníes. La
modestia y la humildad se consideran virtudes entre los iraníes mientras que en
muchos países occidentales cuanto más seguro y enérgico se es mejor lo aceptan a
uno. Muchas personas desconocen estas cosas sobre Irán.
El gobierno iraní reprime a las mujeres
El dogma de que Irán no es un lugar seguro para
las mujeres y que el gobierno iraní les reprime está extendido por todo el
mundo, y se debe a las maquinaciones maliciosas de los medios de comunicación
dominantes. No hay ninguna evidencia de esto aunque sí de lo contrario.
Mientras que las mujeres en Arabia Saudita,
aliado acérrimo de Estados Unidos, no tienen derecho a voto ni pueden conducir
coches, las iraníes dirigen universidades, institutos científicos y ocupan
puestos gubernamentales, como es el caso de la ministra de salud, la doctora
Marzieh Vahid Dastjerdi. La persona encargada de la ciencia y la investigación
es mujer. Durante muchos años la persona encargada del departamento de medio
ambiente fue una mujer, la doctora Masoumeh Ebtekar. Según el ministro de
Ciencia, Investigación y Tecnología de Irán, en 2012 el 60% de los nuevos
estudiantes de las universidades iraníes son mujeres. No conozco cuáles son los
criterios en que se basan los opositores al gobierno de Irán para describir la
situación de las mujeres en Irán. Desde la Revolución Islámica de 1979 el
parlamento iraní (Majlis) tiene varias diputadas cada mandato. Si el número de
diputadas no ha igualado al de los diputados no se debe a que el gobierno
imponga restricciones. ¡Es porque la gente no les ha votado! Creo incluso que en
algunos casos el gobierno ha sido más indulgente con las mujeres que con los
hombres. Es costumbre internacional no escrita que se reclute a las mujeres
igual que a los hombres para cumplir el servicio militar, pero en Irán se exime
a las mujeres de este deber porque el gobierno considera que les puede
perjudicar. De modo que ¿alguien me puede decir cómo reprime el gobierno iraní a
las mujeres?
Irán desarrolla armas nucleares
Sí, ha habido gran controversia sobre el programa
nuclear de Irán, pero los que han creado tal algarabía ham olvidado que el
programa nuclear de Irán lo inició el gobierno estadounidense en los años 50
dentro del marco del programa Átomos para la Paz del presidente Dwight D.
Eisenhower. En aquel momento Irán era todavía un aliado de Estados Unidos y, por
tanto, se le permitía desarrollar la energía nuclear. Ahora que Irán ya no es
aliado incondicional de Estados Unidos, no tiene derecho a energía nuclear, ni
siquiera para fines pacíficos. ¡Cuánta hipocresía!
Los que alegan que Irán tiene intención de crear
armas nucleares no tienen ninguna prueba de ello. Una vez más es la oscura
propaganda de los medios de comunicación dominantes lo que induce a la gente a
pensar esto. A pesar del hecho de que Irán padece las sanciones impuestas por el
Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, Estados Unidos y sus aliados, la
Agencia Internacional de Energía Atómica está en disposición de ofrecer pruebas
creíbles y documentar que el programa nuclear de Irán no tiene una dimensión
militar. Incluso el informe de 2010 de Inteligencia Nacional de Estados Unidos
confirmó que Irán no tiene intención de fabricar armas nucleares. De modo que no
entiendo por qué Estados Unidos y sus aliados europeos insisten tanto en que
Irán desarrolla armas nucleares y se le debe detener.
Las sanciones que Estados Unidos y la Unión
Europea han impuesto a Irán afectan considerablemente a los ciudadanos iraníes.
A causa de estas sanciones, se les niega el acceso a medicinas, alimentos, ayuda
humanitaria y a otras necesidades básicas. El valor de la moneda iraní (rial) se
ha depreciado de forma alarmante y los hombres de negocios se enfrentan a graves
problemas para importar bienes de otros países. Se ha vuelto sumamente difícil
viajar al extranjero debido a los precios exorbitantes del transporte aéreo y
también desde que las embajadas extranjeras en Irán ponen graves trabas a la
concesión de visados a los ciudadanos iraníes.
Esto supone un incalificable castigo colectivo a
los iraníes por un crimen que no han cometido.
Hay otros muchos mitos sobre Irán y la vida
diaria dentro de Irán que se tendrían que desenmascarar para todas las personas
del mundo, pero aquí sólo he mencionado los más indignantes. Los que se dan
cuenta de la realidad de Irán se reirán de la falsedad y desinformación que la
maquinaria de propaganda de Occidente fabrica sobre Irán. Quizá el mejor ejemplo
de dedicación y compromiso de un ciudadano estadounidense al Irán ‘real’ se
encarna en la figura del profesor estadounidense Richard Nelson Frye, estudioso
de Irán de la universidad de Harvard que solicitó hace unos años al presidente
iraní que lo enterraran cerca de la antigua ciudad de Isfahan.
Desterremos de nuestra mente la propaganda y el
despliegue mediático sobre Irán. Sólo se puede conocer este país incomprendido
cuando se desechen los prejuicios y se dediquen un par de semanas a viajar a la
civilización más antigua del mundo y a ver por uno mismo lo que no se puede ver
ni encontrar en Fox News, CNN, BBC, Washington Post y New York Times.
Kourosh Ziabari (nacido en 1990) es un periodista
iraní, corresponsal de diferentes medios y activista por la paz. Ha recibido los
más prestigiosos premios de periodismo de su país. Sus artículos se publican en
revistas y páginas web como Tehran Times, Press TV, Global Research, Iran
Review, Counter Currents and CounterPunch, y se traducen a diez lenguas.
Visto en: Tribuna de Europa
Fuente original: Global Research
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