Esto los ha puesto en una posición privilegiada donde están en condiciones de ejercer un peso fundamental en la formación de la próxima coalición gobernante del país, ya que el partido ganador, el conservador GERB, no ganó suficientes escaños en el Parlamento para formar un gobierno por si mismo.
GERB, último partido gobernante de Bulgaria, renunció en febrero tras fuertes protestas populares contra su mal gobierno, los altos índices de desempleo y la imposición de profundas políticas de austeridad.
“Bulgaria necesita liberarse de la esclavitud colonial”, declara Volen Siderov, el líder de Ataka quien ha logrado captar la atención de un pueblo cansado por la corrupción y la ineptitud de su gobierno. Entre sus propuestas están aumentar los impuestos a los ricos, nacionalizar las empresas y bancos, además de crear un Estado Nacional y Social que provea de salud, seguridad social y cree las condiciones para la prosperidad espiritual y material de todos los búlgaros.
El éxito de Ataka sigue el ascenso del partido social nacionalista Amanecer Dorado, Jobbik en Hungría y Svoboda en Ucrania. Al comentar sobre los resultados, Siderov dijo que un día será el primer ministro de Bulgaria.
Con información de The Sofia Globe
Agencia Nacionalista de Noticias
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