En el año 2.100, la República Checa tendrá aproximadamente 7.680.000 habitantes. Casi una tercera parte consistirá en personas mayores de 65 años, y los menores de 15 años serán solo el 12%. La edad promedio estará cerca de los 50 años subiendo unos 9 años. Así, al menos según un nuevo estudio demográfico elaborado por la Oficina de Estadísticas Checa. Según la socióloga Ivana Gabala, esto transformará el mercado laboral del país.
En la actualidad, los checos son 10.520.000 habitantes. Su número subirá temporalmente a mediados de siglo, sin embargo, la República Checa tendrá solo 9,1 millones de habitantes y en el futuro, mucho menos. Durante los próximos noventa años, la población podría reducirse hasta en un 42%.
"Lo más probable es que la población crezca en la República Checa hasta el 2018, que alcanzará los 10,54 millones de personas. En los años siguientes, la migración internacional no será capaz de compensar la creciente brecha entre el número de muertes y nacimientos. En el 2101 se reducirá el número de habitantes de la República Checa hasta los 7,68 millones de personas" explica Michaela Němečková del departamento de estadísticas demográficas de la Oficina de Estadísticas Checa.
En la segunda mitad de este siglo, se verá un incremento principalmente en las personas mayores. El envejecimiento de la población, según los demógrafos, es el cambio más grande de la sociedad en los países desarrollados. Las personas mayores de 65 años van en aumento, gracias a que las personas cambian su estilo de vida y la medicina moderna les hacen vivir más tiempo.
"Aumenta la extensión de la esperanza de vida, mientras que un menor número de nacimientos se traducirá en un aumento significativo de la proporción de personas mayores de 65 años en la población" dijo el demógrafo Miroslav Šimek. En el año 2101 habrá un tercio de la población mayor de 65 años, ahora este grupo representa el 17% de la población.
También aumenta la esperanza de vida. Mientras que las mujeres viven ahora casi 81 años y los hombres de 75 años de edad, al inicio del próximo siglo, este límite se desplaza a los 91 años para las mujeres y casi 87 para los hombres. "Este desarrollo es un punto de vista demográfico completamente natural y no son diferentes a lo que ocurre en el oeste y el norte de Europa", dijo Šimek.
"Sólo la fertilidad alta y estable podría mitigar la disminución futura de la población checa y el envejecimiento de la población. Incluso la inmigración masiva no es capaz de revertir estas tendencias por si solas", ofrece una posible solución Terezie Štyglerová, de la Oficina de Estadística Checa.
Resto de la información en: Mladá fronta DNES
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