Rey Abdullah tratará a los ateos y a los disidentes políticos como enemigos de Arabia Saudita |
Las regulaciones ponen a los ciudadanos seculares que cometen crímenes de pensamiento en la misma categoría que los grupos terroristas violentos, como Al-Qaeda de la rama de Yemen o a la Hezbollah Saudí.
En virtud del nuevo decreto por el rey Abdullah, de Arabia Saudita, será hasta 20 años de cárcel la pena a todos lo que luchan en conflictos en el extranjero - en un aparente intento de disuadir a los saudíes que se unen a los rebeldes en Siria.
Pero la ley también se aplicará a cualquier ciudadano saudí o extranjero residente en el reino que "haga
convocatorias de pensamiento ateo en cualquier forma o poner en cuestión los fundamentos de la religión islámica en la que se basa este país."
Las leyes han sido denunciadas por grupos de derechos humanos por no hacer ninguna distinción entre la expresión religiosa y el extremismo violento.
"Las autoridades saudíes no han tolerado las críticas a sus políticas, pero estas recientes leyes y reglamentos convierten casi cualquier expresión crítica o asociación independiente en delitos de terrorismo", dijo Joe Stork, subdirector para Oriente Medio y el Norte de África de Human Rights Watch.
La medida de lucha contra el terrorismo también han sido objeto de burla de la rama de Al Qaeda de Yemen que dijeron que no disuadiría a los combatientes del grupo islamista y que demostraron que el reino estaba a sueldo de los Estados Unidos.
En una declaración en línea, Al Qaeda en la Península Arábiga (AQPA) también dijo que la designación de Riad de la Hermandad Musulmana - un grupo político cuyas alas han presentado a las elecciones en varios países - como una organización terrorista demostró que las autoridades seculares nunca tolerarían grupos islamistas.
AQAP, considerado como una de los más peligrosas ramas de Al Qaeda después de que conspirara ataques a aviones internacionales, se cree que tiene varios cientos de militantes saudíes luchando junto contrapartes yemeníes contra el gobierno en Saná en Yemen.
En la primera respuesta pública del grupo a las medidas, un alto funcionario de AQAP Ibrahim al-Rubaysh, habló en una cinta de audio en línea sobre las autoridades saudíes: "Sus empleadores son la Casa Blanca." Agregó que Riyadh pareció considerar las autoridades estadounidenses como "dioses".
Dirigiéndose a los predicadores musulmanes a favor del gobierno de Arabia Saudita, Rubaysh dijo: "Usted es más americano que los propios norteamericanos."
Las autoridades religiosas islámicas de Arabia Saudita se han pronunciado en contra de los combatientes sauditas que van a Siria, pero el Ministerio del Interior no obstante, estima que alrededor de 1.200 saudíes han ido.
Riad teme que regresen combatientes para centrarse en la gobernante familia real Al Saud - como ocurrió después de las guerras de Afganistán e Irak.
Las autoridades saudíes temen también a la Hermanos Musulmanes, cuyas doctrinas islamistas sunitas cuestionan el principio de Arabia por el gobierno dinástico. Han tratado de conseguir apoyo en el interior del reino desde las revoluciones de la Primavera Árabe.
En Egipto, la Hermandad, que ganó todas las elecciones después de la caída del veterano líder Hosni Mubarak en 2011, ha estado a la clandestinidad desde que el ejército derrocó al presidente Mohamed Mursi, un miembro del grupo, que también sufrió la represión en la era Mubarak.
Completa en: Daily Mail
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