El pasaporte sueco se ha convertido en una mercancía internacional. En este momento, 177.000 de ellos recorren la UE. Muchos de estos han terminado en manos de contrabandistas profesionales.
Según Frontex, la agencia fronteriza de la UE, el pasaporte sueco es el más común entre los otros pasaportes europeos para las personas que tratan de entrar en la UE con un "mire paso por igual", es decir, un auténtico pasaporte perteneciente a otra persona.
Los pasaportes son utilizados por personas extranjeras que se parecen al verdadero propietario para poder viajar libremente a Suecia. Lo más a menudo es visitar a un familiar en un país de la UE o pedir asilo aquí. Los pasaportes también pueden ser utilizados por los delincuentes que son buscados a nivel internacional.
Se trata de grupos de delincuentes e inmigrantes con ciudadanía sueca que han puesto a la venta sus pasaportes a los traficantes de personas o han sido enviados a los familiares en el extranjero que quieren llegar de forma ilegal a Suecia en busca de asilo.
Cuando Frontex encuestó a 1.300 personas con "aspectos similares al de pasaporte" durante una investigación en curso de un año y medio resultó que 440 pasaportes que habían sido notificados como pérdida eran pasaportes suecos.
"Hay una gran demanda de pasaportes suecos. Son difíciles de falsificar. Por lo tanto, se utilizan en lugar de uno que tenga un aspecto similar" dice Soren Clerton, superintendente de la Policía Nacional.
En cinco años, el número de pérdidas de pasaportes suecos ha aumentado de 46.000 a 60.000 anualemente. Según Soren Clerton, tener tales pasaportes en el mercado significa un beneficio de 4.000 a 5.000 coronas suecas.
"Se nos han informado de que el pasaporte sueco ha sido vendido hasta por 80.000 coronas suecas. El mérito es grande para los que lo pierden hasta nueve y diez veces en un año" dice.
Bajo las reglas actuales, se pierde la pista de cuántos pasaportes son extraviados. Solo se tiene que presentar un informe de pérdida y solicitar uno nuevo por 350 coronas suecas.
La idea es que el precio se pueda aumentar gradualmente hasta llegar a los 980 coronas suecas por cada vez que una persona solicita un nuevo pasaporte.
Quienes pierdan el suyo por tercera vez en poco tiempo, serán llamados a interrogatorio por la policía e investigados.
Existe relativamente pocos usuarios que tengan un aspecto similar a las personas de los pasaportes. Esto se debe a que los solicitantes de asilo lo utilizan solo para subir a bordo de vuelo hacia Suecia o a cualquier otro país europeo. Una vez que la persona ya se encuentra en el interior de país de la UE, esconden el documento y solicitan asilo con su verdadera identidad.
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