La iglesia está en riesgo de desaparecer en una generación, advierte un arzobispo de Inglaterra sobre la crisis del cristianismo

La Iglesia de Inglaterra está a sólo "una generación de distancia de la extinción", dice ex arzobispo de Canterbury.

George Carey responsabiliza a los líderes de la iglesia, quienes deberían estar "avergonzados" de su incapacidad para llevar a los jóvenes en sus servicios. 

Su duro mensaje fue repetido por el arzobispo de York, quien le dijo al Sínodo General que comparado con la necesidad de atraer nuevos feligreses, "todo lo demás es como volver a colocar los muebles cuando la casa está en llamas".

El reverendo John Sentamu dijo al Sínodo (donde los líderes debatirán como persuadir a los tradicionalistas de aceptar a mujeres obispos) que pasaron demasiado tiempo "discutiendo sobre palabras y frases, mientras que el pueblo de Inglaterra se queda sin sentido en medio del forcejeo, la ansiedad y la desesperación".

Carey, quien cesó en el Palacio de Lambeth en 2002, sigue siendo uno de los activistas más alto perfil para el cristianismo en el país.

Él dijo: "Debemos estar avergonzados de nosotros mismos. Estamos a una generación de distancia de la extinción y si no invertimos en la gente joven no va a haber nadie en el futuro".

Las cifras más recientes del censo han mostrado una disminución de más del 10% en una década en el número de personas que se llaman a sí mismos cristianos, y los tribunales han rechazado una serie de peticiones de los cristianos para el respeto de la ley por sus creencias.

El mes pasado, uno de los jueces más antiguos del país entregó un nuevo golpe. El presidente de la División de Familia, James Munby declaró que los tribunales no son cristianos y "los días han pasado, cuando el negocio de los jueces era el cumplimiento de la moral o las creencias religiosas."

Los ministros, que ignoraron las objeciones de la COFE al matrimonio entre personas del mismo sexo, han ido tan lejos como para poner en peligro la autonomía de la Iglesia de Inglaterra al insinuar que el Gobierno intervenga para obligar a su lado si no puede traerse para aprobar el nombramiento de mujeres obispos.

La advertencia de Lord Carey fue emitida en un discurso en la Iglesia de la Trinidad en Shrewsbury en el marco de la Conferencia de Iglesias de Shropshire 2013.

"Estoy convencido de que las iglesias pueden crecer, necesitan crecer y deben crecer", dijo a su audiencia. Sin embargo, dijo que ir a la iglesia "no es algo que sea natural para las personas en sus vidas hoy en día."

Sin embargo, agregó: "Hay mucha violencia, muchas familias divididas, muy poca seguridad en el empleo, muchos jóvenes no tienen nada a lo que aspirar. Todavía se sigue dando el caso en que las personas esencialmente continúan buscando la plenitud espiritual".

La advertencia del Dr. Sentamu llegó en un documento que se describe el peligro real de un colapso de la iglesia en el Sínodo, el parlamento de la COFE.

Su artículo hablaba de una "creciente desconfianza y la antipatía hacia la fe", y agregó: "En pocas palabras, un menor número de clérigos ahora están administrando a una población mayor y tienen que supervisar un número más o menos similar de edificios con menos fieles a pagar por ellos."

"Más importante, es que la disminución haría imposible mantener la Iglesia de Inglaterra como una institución nacional, que está presente en todas las comunidades."

Las congregaciones en las iglesias de Inglaterra en los domingos están funcionando a la mitad de los números de  la década de 1960 y en las últimas dos décadas, los católicos romanos que asisten a la iglesia ha registrado un descenso similar.

Los números de cristianos están aumentando rápidamente en algunas partes del mundo, especialmente en África. A nivel mundial, las iglesias anglicanas tienen entre 70 y 80 millones de seguidores.

Sin embargo las iglesias cristianas están bajo la presión del Islam, sobre todo en el África occidental, y la persecución y la violencia en algunas partes de Oriente Medio y Pakistán.

Daily Mail