Bajo una nueva ley de solicitantes de asilo cuya solicitud ha sido rechazada son capaces de solicitar dinero si voluntariamente regresan a su país de origen. El importe de la financiación depende del estado de desarrollo de su país de origen.
De acuerdo con el Servicio de Inmigración de Finlandia, una persona a la que se le ha negado el asilo o que haya retirado su solicitud de asilo pueden solicitar una subvención para facilitar la repatriación a su país de origen.
Puedan concederse subvenciones en efectivo, mercancías o una mezcla de ambos. Parte del dinero dado para el retorno voluntario se paga antes de la salida y el resto se paga cuando una persona ha regresado a su país de origen. El nuevo decreto legal entró en vigor en julio.
El tamaño de la mano de salida varía en función del "nivel de desarrollo" de la situación a la que la gente vuelve y pueden variar de cientos de miles de euros. Por ejemplo, las personas de los llamados grupo A de naciones como Afganistán, Irak y Somalia reciben asistencia para la repatriación de unos 1.000 euros.
Las subvenciones podrán aumentar si el solicitante ha sido, por ejemplo, una víctima de la trata de personas, de acuerdo con el Servicio de Inmigración finlandés.
Además del dinero, el Estado también reembolsa el costo de los billetes de avión, documentos de viaje y otros gastos. Actualmente, la repatriación voluntaria es organizado por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), pero planea poner el servicio a licitación antes de fin de año.
En el pasado, el costo de la repatriación voluntaria en Finlandia fue compartida por el Servicio de Inmigración y el Fondo Europeo para el Retorno, con la OIM responsable de implementar el programa. En el futuro el Estado finlandés pagará la factura en su totalidad.
Una "solución más barata" para Finlandia
El objetivo de la regulación es acelerar la repatriación de las personas que crean que es una carga económica, o que no pueden ser repatriados de Finlandia por la fuerza. Mientras que la policía tiene el derecho de colocar a una persona en un avión por la fuerza, esto no siempre es una opción viable.
"Hay, por ejemplo, los países que no aceptan la devolución de cualquier persona que no sea los que vienen voluntariamente", dice Jorma Kantola, oficial de asuntos legislativos del Ministerio del Interior.
"Por ejemplo, Irak sólo aceptará el retorno de sus ciudadanos si ellos mismos lo solicitan", añade Kantola.
Aunque él dice que la repatriación voluntaria es a menudo la opción más humana, una de las motivaciones para ofrecer el folleto es totalmente financiera.
Pagar por el mantenimiento de una persona que vive en el limbo, en un centro de acogida es caro.
"No hay apoyo de la sociedad para una opción más económica, que incluye la compra de entradas y dar una subvención, en comparación con la policía haciendo su trabajo y que tienen dos escoltas en el acompañamiento", dice Kantola.
De acuerdo con el sitio de la repatriación voluntaria de Finlandia Vapaaehtoinenpaluu.fi 318 personas regresaron voluntariamente a su país de origen en 2014. De ellos, 75 eran iraquíes, 37 de Rusia y 37 de Ucrania. 410 solicitudes de apoyo al retorno voluntario se hicieron durante el mismo período.
Yle
No hay comentarios:
Publicar un comentario