Chris Tomlinson 31 de marzo 2017 Las feministas en Estocolmo están dejando las áreas como las notorias zonas migratorias de Husby y Tensta porque dicen que los fundamentalistas religiosos ahora gobiernan esos suburbios.
Nalin Pekgul es una autodenominada feminista y ex parlamentaria de los socialdemócratas suecos de izquierda. Durante más de 30 años, vivió en el suburbio de Tensta, en Estocolmo, pero dice que ya no se siente segura allí. Afirma que los fundamentalistas musulmanes han asumido el control y ella no siente que puede visitar el centro de Tensta sin ser acosada, informó la emisora sueca SVT.
De acuerdo con la Sra. Pekgul, la situación de las mujeres en la vida pública en la zona se ha deteriorado en los últimos años. Señaló que ha habido un aumento en el fundamentalismo religioso entre los hombres en la zona, muchos de los cuales proceden de antecedentes migratorios. Pekgul intentó combatir la tendencia organizando reuniones en cafeterías, pero pronto abandonó la idea.
"En Tensta soy un rostro conocido y no tengo ganas de despertar problemas cuando soy acosada", dijo Pekgul explicando por qué ya no entraba en el centro del suburbio. Cuando se le preguntó si se quedaría en el suburbio, dijo: "Siempre espero que se acabe. Uno nunca debe olvidar que la gran mayoría aquí está en contra de los fundamentalistas."
Zeliha Dagli, un ex político del partido de izquierda, terminó moviéndose del suburbio calificado como zona prohibida de Husby. Dagli describió a Husby como el autodenominado "policía moral" que intenta controlar el comportamiento de las mujeres en el área.
La agresión hacia las feministas, en particular, se convirtió en un tema que ella dijo. "Hubo rumores de que queríamos quitar los velos de las mujeres", dijo. "Que no éramos buenas y decentes mujeres, que queríamos transformar a todas las mujeres con la mentalidad sueca. Ellos dijeron que debía meterme en mis asuntos, y entonces ya no me sentía tan segura".
Dagli ahora vive en el área de la ciudad de Estocolmo y dice que ella es más feliz debido a que puede usar cualquier ropa o decir lo que quiere sin temer por su seguridad. Ella dijo que consideraría volver a Husby, pero sólo si la zona se volviera más segura para ella.
Husby, como el suburbio de Rinkeby, está muy poblado de inmigrantes, muchos de ellos de países de África y Oriente Medio, y muchos de ellos musulmanes. En mayo del año pasado, un equipo de cine noruego fue atacado por un grupo de locales en Husby mientras intentaban entrevistar al economista y autor sueco Tino Sanandaji.
Sanandaji, un inmigrante kurdo iraní, ha sido criticado por muchos en Suecia por su nuevo libro Mass Challenge que describe los problemas que Suecia ha enfrentado debido a la inmigración masiva. Una biblioteca en Estocolmo incluso se negó a almacenar el libro acusándolo de racista.
El cineasta estadounidense Ari Horowitz también fue atacado en Husby el año pasado durante una investigación sobre las zonas prohibidas de Suecia. (zonas de exclusión donde no entra tampoco la policía)
Breitbart
En febrero del año pasado las feministas lanzaron una campaña contra los suecos escribiendo "por favor, no nos protejan si somos violadas por inmigrantes". Por qué se mueven a toda velocidad a los barrios de mayoría sueca entonces? Swedish Feminists: “Please Don’t Protect Us if We Get Raped by Immigrants”
Ya avisábamos hace mucho tiempo, de que las femi-abortistas financiadas de George Soros iban a recibir un buen escarmiento, por parte del Islam radical. Por su tolerancia excesiva a los de la religión de paz y su odio excesivo hacia el caucásico europeo. Pues yo al menos en este caso ni me alegro ni me apeno, los 2 bandos afectados son mi enemigo y si se combaten entre si, más sana va a estar Europa de tantos virus que ha echo enfermar a nuestra ancestral madre tierra durante los últimos tiempos.
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